Aarón Pino Martínez, originario de Tecate, declaró al periódico frontera que encontró a la perra crucificada y muerta antes de subir la foto a Facebook.
Quejándose de haber recibido amenazas, el joven declaró que todo se trata de un malentendido, que el no mató a la perrita y que todo se trata de un "malentendido".
El "skater" dice que es "super tranquilo, tranquis" y que algo sin "chiste" como la imagen que subió a Facebook se hizo noticia.
"La gente no tomó el sentido del humor", insistió el joven, quien dijo que quería enterrar a la perra porque "iba a apestar".
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