Expertos en el tema dicen que la nueva división principal de la población de la tierra es una brecha cada vez mayor entre las personas terriblemente obesas o terriblemente hambrientas.
Durante una entrevista con Al Jazeera America, John Hoddinott del Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias (IFPRI) dijo que “El mundo se está dividiendo en un grupo de personas que consumen demasiado y un grupo que consume muy poco”, así como “Esta división es más marcada en los países en desarrollo debido a la desnutrición crónica, la cual sigue siendo mucho más frecuente”.
El número de personas obesas en la tierra se ha casi triplicado desde 1980, y los números de América Latina, el Norte de África y el Medio Oriente están subiendo tan rápido como en América del Norte, el cual sigue siendo el continente más gordo del planeta.
A pesar de la asociación histórica de la gordura con la riqueza y el hambre a la pobreza, la explosión de la obesidad mundial parece trascender ampliamente la situación socioeconómica. Ha dado lugar a un nuevo fenómeno llamado “hambre oculta”, en el que comer en exceso alimentos procesados conduce simultáneamente a los consumidores con sobrepeso y desnutrición.
Los expertos dicen que una de las causas es la globalización corporativa: hasta que se sepa cómo hacer que una manzana sea más barata que una bolsa de papas fritas, o hacer que las cocinas locales sean alternativas atractivas a lugares donde la comida rápida puede producirse fácilmente y ser transportada en forma de bombas arteriales, esta división seguirá creciendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario