La compañía de telecomunicaciones AT&T, con sede en Dallas, Texas ha reportado la adquisición en 48.5 mil millones de dólares de DirecTV, la mayor compañía proveedora de televisión directa al hogar de Estados Unidos.
El anuncio fue hecho luego de que las juntas directivas de ambas compañías se reunieran este domingo para afinar los detalles de la transacción.
“Esta es una oportunidad única que redefinirá la industria del entretenimiento de vídeo”, dijo Randall Stephenson, director ejecutivo de AT&T, según un comunicado.
La compra permitirá a AT&T crear “una empresa capaz de ofrecer nuevos paquetes y entregar contenidos a los consumidores a través de múltiples dispositivos, desde pantallas móviles, televisores, computadoras portátiles, coches e incluso aviones”, aseguro Stephenson.
AT&T dijo a sus accionistas este domingo que la adquisición de DirecTV “ofrece numerosas oportunidades de crecimiento”, en parte por el aumento de los ingresos por televisión.
AT&T pagará 48 mil 500 millones por DirecTV, tanto en acciones y efectivo. También asumirá las deudas de DirecTV, lo que hace que el valor total de la operación exceda los 67 mil millones.
La adquisición se registra tres meses después de que la compañía de cable Comcast Corp. Acordara comprar Time Warner Cable.
Las dos transacciones evidencian cómo las grandes compañías en el campo de la televisión y las telecomunicaciones están fusionándose para hacer frente a un paisaje cambiante en los medios de comunicación.
La compra de DirecTV vendrá a dar a AT&T un proveedor de TV por satélite para combinar con su oferta de telefonía e Internet de banda ancha como rampas de competencia hacia el futuro.
La suma de DirecTV permitirá a AT&T el poder ofrecer a sus suscriptores en Estados Unidos un paquete de televisión, teléfono y servicios de banda ancha de alta velocidad.
La transacción crea una empresa líder en la distribución de contenidos a través de plataformas móviles, de vídeo y de banda ancha.
La venta se da también al tiempo que el crecimiento de los suscriptores de DirecTV ha disminuido considerablemente en los últimos trimestres, lo que refleja un estancamiento más amplio en el mercado de TV de paga en Estados Unidos.
Las compañías de cable han sido capaces de compensar la disminución de suscriptores de video mediante la venta de internet de banda ancha.
Sin embargo, los operadores de satélites como DirecTV, no pueden ofrecer servicios de acceso a Internet a velocidades que son competitivos con las compañías de cable y teléfono.
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