Para muchas personas está bien mirar pornografía, y está bien tener una computadora para realizar diferentes labores, pero es probablemente adecuado el no combinar los dos y luego mentirle a las autoridades al respecto.
Brent Sandy, un profesor de música en la Universidad de Iowa, fue acusado de hacer un reporte falso, posesión de una sustancias controladas, y robo en tercer grado después de decirle a la policía que su computadora portátil fue robada de la escuela porque no quería que nadie descubriera que él había descargado imágenes pornográficas en la misma.
En lugar de limpiar el historial de su computadora como cualquier persona lo haría, Sandy se asustó y le dijo a la policía que fue robada de su oficina. La dirección IP del equipo se rastreó rápidamente a su casa, donde la policía descubrió que junto con una pequeña cantidad de marihuana y una pipa.
El incidente no era algo tan embarazoso, principalmente porque Sandy jamás había sido acusado de algún cargo relacionado con pornografía. Una lección para todos nosotros: limpiar nuestros historiales de búsqueda en internet y no mentirle a la policía.
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