Un estudio realizado por el Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNSR), ha demostrado que la ortografía de los adolescentes no empeora como consecuencia de las contracciones y la forma en que alteran las palabras al escribir mensajes de texto.
En las universidades de Poitiers y de Tours se analizaron más de 4,500 mensajes de texto un grupo de jóvenes de 12 años que jamás había tenido un teléfono celular, y aunque utilizaban los mismos "textismos" que los otros jóvenes, su ortografía no cambió.
"Al contrario de los temores que se expresan a menudo, los buenos estudiantes son quienes utilizan muchos 'textismos' mientras que los menos buenos no utilizan tanto", se expresa en el informe del CNSR, publicado en Journal of Computer Assisted Learning.
Y se agrega: "La práctica de los mensajes de textos no tiene influencia en la ortografía de los estudiantes" sino que es "su nivel en ortografía el que determina el tipo de faltas presentes en los mensajes".
Luego de un año ininterrumpido de estudios, se llegó a la conclusión de que no existe "ningún vínculo entre el nivel en ortografía tradicional y los mensajes de texto enviados".
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